Quizá...

Hay veces que tenemos dentro sentimientos y pensamientos que no dejamos salir.

Otras veces los sacamos fuera sin que nadie sepa que están ahí... Los conservamos con nosotros, para hacerlos nuestros. 

Hace muchos años llenaba libretas de palabras, frases, rimas, poesías... Rondaban por mi cabeza todo el día y las guardaba siempre conmigo, pero no dejaba que nadie más fuera partícipe de ellos.

Simplemente me sentía bien escribiendo y lo hacía sin más. 

Pero sabéis una cosa, mis queridos Nómadas... Hace poco, algo en mi pensamiento cambió y empecé a participar en concursos de poesía, relatos, etc.

Quizá si no me hubiera perdido, nunca me hubiera encontrado a mí misma y nunca hubiera conseguido todo lo que he logrado hasta este momento...

Y es solo el principio. Llevo muy poco tiempo en este mundo de puertas para afuera, porque de puertas para adentro siempre ha estado conmigo. 

No voy a dejar de hacer algo que amo y realmente me hace sentir en paz conmigo misma.

Como decía el gran John Lennon, el cual nos invitaba a Imaginar

"Es fácil si lo intentas (...) Quizás digan que soy un soñador, pero no soy el único..."

Tengo la suerte de ser una gran soñadora. Y tengo por seguro, que nunca dejaré de serlo. Aunque vivamos cosas o situaciones malas, la vida me ha enseñado que siempre hay algo bueno a la vuelta de la esquina. Y eso, amigos míos, es lo que realmente hace que cada día cuente hacía delante.

Hace justo una semana recibí una nueva alegría. Una de mis poesías pasó de estar guardada en un cuaderno, a formar parte del libro Por amor a la Poesía, el cual podéis encontrar en la página web Letras con arte.

Hoy, Día de la Poesía, me llena de alegría e ilusión poder compartirla aquí con vosotros. 

La poesía me acompaña desde hace muchos años... Es un honor poder tener un pequeño lugar en este gran mundo que la envuelve.

Feliz fin de semana a todos... Y ya sabéis, Let´s Dream!! 

Quizá...

Quizá te perdiste entre letras

y así te encontraste otra vez.

Quizá la oscuridad del cielo

te dio claridad para verlo.

Quizá esa señal en el tiempo

te ayudó a soñarlo de nuevo.

Quizá los sentimientos se mezclan

entre palabras secretas.

Quizá tus pasos se pararon

y sin querer me buscaron...